21.- SARAH SNAPE
Otra encapuchada se levantó y se posicionó en el estrado, esperando a la lluvia de colores para poder empezar a presentarse. Una chica morena de ojos azules quedó en cuanto la capa desapareció, todos sabían ya que sería la hija de Snape y Mary. Al parecer ninguno de los tres hijos había heredado los ojos de Snape, puesto que los tres hermanos tenían los ojos azules como Mary.
-Hola, supongo que ya os habréis imaginado que soy la tercera hija de Severus Snape y Mary Nemel.-dijo ella, en un tono serio, pero que les resultó muy gracioso a todos los del futuro.-Mi nombre es Sarah Snape, tengo 15 años y estoy en Slytherin.-a nadie del pasado le sorprendió esa declaración y, cuando la casa mencionada iba a comenzar a aplaudir casi todos los del futuro empezaron a carcajearse, incluida la propia Sarah, lo cual fue sorprendente, pues creían que al ser hija de Snape no tendría sentido del humor, igual que sus hermanos y padres.-Es broma, es broma. ¿Yo Slytherin? Puff, ¿y qué más? ¿Voldemort es bueno?-todos los del futuro se rieron aún más ante la broma de la chica.-Aunque a mis padres no les haga mucha gracia, voy a Gryffindor.-todos los del pasado se impresionaron por el carácter de la chica, más parecido al de Sirius Black que al de Snape o Mary. La casa de los leones aplaudió, aún algo conmocionados.-Juego a Quidditch como cazadora. Cuando me gradúe en Hogwarts seguramente me dedicaré a jugar Quidditch profesionalmente, aunque George Weasley me ha ofrecido ser la jefa de la sucursal de París de Sortilegios Weasley en más de una ocasión, no estoy segura de lo que haré, pero me quedan tres años así que aún me lo puedo pensar.
- ¿Sortilegios...-empezó Fred.
-...Weasley?-acabó George.
-Sí.-Sarah asintió.-Es la tienda de bromas que abristeis en cuanto acabasteis Hogwarts. En el futuro hay sucursales por todo el mundo.
-¡Guay!-exclamaron los gemelos Weasley chocando las manos.
-Bien, continúo.-siguió Sarah.-Soy Canuta en las Merodeadoras.-dijo ella, muy orgullosa de su apodo.
-¿Canuta?-preguntó Sirius levantando una ceja en dirección a la chica.
-Sí.-dijo Sarah retadoramente.- ¿Algún problema con eso?
Sirius levantó las manos en señal de paz mientras contestaba:
-No, claro que no.-a continuación le sonrió a la chica con una mezcla de orgullo y apreciación. Sonrisa que Sarah le devolvió encantada.
-¿Bromista y Gryffindor?-preguntó Snape, que tenía un tono de piel ligeramente amarillo por la impresión.- ¿Cómo sigo vivo en el futuro?
Sarah rió mirando a su padre con cariño.
-No soy tan mala como crees.-dijo ella, a lo que todos los del futuro levantaron una ceja.-Bueno, al menos no lo soy en casa.
-Menos mal.-esta vez fue Mary la que habló, la cual también había palidecido un poco por lo dicho por la chica.
-Mis padrinos son Imma Macons y Sirius Black, aunque más bien sería el cuadro que hay de Sirius Black en la mansión Black.-dijo ella algo divertida, mientras que Imma agradecía y Sirius miraba raro a la chica.
-¿Cómo narices acabé siendo tu padrino?-preguntó Sirius algo extrañado.
-Bueno, esa...-las risas no la dejaron seguir hablando.-Esa es una buena pregunta. Que solo mi hermano Isaac sabe contestar, el del futuro, no este de aquí.-dijo mirando al Isaac del pasado.-Aunque creo que básicamente fue porque eras al padre de Orion y como él era hijo de mi madrina y mis padres habían perdido inspiración sobre padrinos, pues ahí lo tienes.-contestó ella, gesticulando exageradamente con las manos.-Oh, casi se me olvida, tengo novio, y es, precisamente, el hermano mayor de la novia de mi hermana mayor, Frank II Longbottom.
Severus miró al chico con fastidio, mientras que este se escondía detrás de Theodore, el cual estaba que le daba algo, pues dos de sus hijo salían con dos de los hijos de su profesor de pociones y jefe de casa. Pero si a Theo le daba algo, a Neville ya se lo había dado, pues su cara tenía un color que estaba a medio camino entre el amarillo, el morado y el verde, y parecía que iba a vomitar o desmayarse en cualquier momento. Draco y Harry se encargaron de los dos padres adolescentes, mientras que Mary sonreía algo divertida a su, no sabía cómo llamarle, ¿novio?, ¿amante?, ¿prometido? Porque Mary tenía muy claro que iba a obligarlo a casarse con ella si hacía falta, ya que Snape debía hacerse cargo de su familia.
Una vez recuperados los padres de su novio, la chica hizo una reverencia y se despidió para irse a sentar con sus padres y hermanos.
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